Si de brindarle calidez a un ambiente se trata, sin dudas las alfombras de pelo largo se llevan todas las de ganar. Actualmente este tipo de moquetas son fabricadas en los más diversos materiales, dejando atrás los tiempos donde la lana tenía su predominio. Por tal motivo, creamos este artículo con información sobre cómo cuidar y limpiar alfombras de pelo largo.
Cuidados de las alfombras de pelo largo
Como te imaginarás o habrás notado si tienes una, las alfombras peludas lamentablemente para sus dueños, tienen la capacidad de acumular mayor cantidad de polvo y otro tipo de suciedades entre sus fibras, precisamente por la longitud de éstas.
En consecuencia, una de las primeras tareas que se indican para su correcto mantenimiento es pasar una aspiradora. La frecuencia del procedimiento quedará determinada por el lugar que ocupe la alfombra. Dependiendo del ambiente, hasta podría necesitar un aspirado diario.
Si permites que el polvo y los microorganismos (ácaros, bacterias, hongos, etc.) se acumulen sobre la superficie de la alfombra, a la larga podrían surgir cuadros de alergia entre los habitantes de la casa.
Limpiar alfombras peludas
Una buena técnica para la limpieza de las alfombras de pelo largo sale una vez más de entre las clásicas recetas de la abuela. Deberás recurrir al bicarbonato, un gran aliado para este tipo de trabajos debido a que su aplicación no dañará los tejidos y presenta un porcentaje alto de efectividad.
El procedimiento para limpiar en seco con bicarbonato es muy sencillo, espolvorea el producto sobre la superficie y deja que actúe durante aproximadamente una hora. Puedes acompañarlo con un poco de sal para potenciar el efecto limpiador.
Transcurrido el tiempo antes mencionado, procede a aspirar con cuidado toda la alfombra, asegurándote de retirar el bicarbonato y los demás restos de suciedad que, como podrás apreciar, se desprenderá fácilmente de las fibras y también te será útil para quitar el mal olor.
Utilizar vaporeta para limpiar alfombras de pelo largo
Otra herramienta muy útil para la limpieza de este tipo de alfombras son las vaporetas, también llamadas hidrolimpiadoras o hidrolavadoras. Mediante el vapor de agua caliente lograrás desprender la suciedad de los tejidos.
Puedes colaborar con el trabajo de la pequeña máquina esparciendo antes bicarbonato sobre el tapete. Haciendo clic en el siguiente enlace podrás obtener más información sobre cómo limpiar alfombras con vaporeta.
En este caso el secado posterior de la alfombra resultará imprescindible para evitar la aparición de humedad. Puedes hacerlo mediante un secador de pelo o exponiéndola al aire libre, pero no directamente al sol.
Evitar las manchas en las alfombras de pelo largo
Cuando un líquido se derrama sobre la superficie, o alguna otra cosa que pueda dejar manchadas las fibras (como esmalte de uñas, vómito, chocolate, etc.), deberás proceder con rapidez. Antes que nada, retira con un paño o papel de cocina todo lo que puedas de ese elemento, pero sin presionar para que no se impregne aún más.
Luego, con agua tibia y un poco de jabón lava la zona afectada. Recuerda que siempre debe ser desde afuera hacia adentro para no agrandar la mancha. Como expresamos anteriormente, una vez concluido el lavado, asegúrate de que la alfombra quede bien seca.
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